Los
compañeros del Club Mulhacén de Granada han programado una visita por Sierra
Mágina y encantados con la propuesta nos unimos a ellos.
Esta
cadena montañosa se extiende por la parte Centro-Sur de la provincia de Jaén, a
unos treinta kilómetros de la misma capital jienense. Sobresale en el paisaje
como una enorme mole pétrea rodeada por un mar de olivos. Sus estribaciones
penetran en la vecina provincia de Granada a través de la Sierra de Alta
Coloma.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Su
núcleo principal está formado por varios altos que superan los 2.000 m de
altura, precisamente este núcleo central se encuentra bajo la protección de la
figura de Parque natural; algunos interesantes endemismos botánicos habitan
estas zonas de cumbres. La orografía del conjunto está marcada por un relieve
muy escarpado de fuertes pendientes que ofrece un atractivo paisaje. La
totalidad del macizo está integrado por rocas calizas y dolomíticas sobre las
que la acción del agua, el hielo y el viento ha modelado un abrupto paisaje de
importantes zonas cársticas. El clima que impera es típicamente mediterráneo
con abundantes lluvias en otoño y primavera, lo que genera una vasta red de
riachuelos que suelen verter sus aguas en los ríos Guadalbullón y Jandulilla.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
A
la llamada del Club Mulhacén acudimos quince compañeros, quedamos en el sitio
de siempre y puntuales partimos hacia nuestro destino.
Para
llegar a la zona desde Granada entramos por la autovía A44 (Granada-Jaén).
Tomamos la salida 59 en dirección Cambil - Huelma (A324), proseguimos por esta
vía hasta llegar cerca del área recreativa del Obispado. En un lateral de la
carretera hay un espacio con carteles informativos sobre el entorno y, es allí
donde dejamos los vehículos.
A
pesar de las fechas invernales, nos acompaña un maravilloso día primaveral,
casi sin viento, con un radiante sol aunque con una atmósfera algo acuosa
debido a la alta humedad. La panorámica del entorno nos fascina. Las grisáceas
copas de los miles de olivos brillan bajo la oblicua luz de la mañana. Los blancos
inmaculados de las flores de los almendros bordean los cuidados campos mientras
ante nuestros ojos se levantan las
estribaciones de Sierra Mágina con sus
refulgentes pinares que brillan con un verdor
amarillento que parecen pedir la
ansiada lluvia.
Comenzamos
el camino, andando un centenar de metros por la cuneta de la carretera hasta
tomar una pista (por nuestra derecha) en muy buen estado que circula entre los
cuidados olivares. Podríamos haber recorrido la parte de pista con los coches
pero en ocasiones anteriores esta pista estaba en peores condiciones y
preferimos andar este tramo
entre los olivos. Al poco un panel informativo nos
comunica detalladamente la ascensión hasta el pico Mágina y Miramundos.
Proseguimos por la pista unos cientos de metros más hasta alcanzar, en una
curva, el final de un barranquillo desde donde por su parte izquierda (indicado
por hitos de piedras) remonta un sendero que tomaremos para la subida. La
vereda zigzaguea en continuo ascenso por entre un denso y agradable pinar
hasta
alcanzar la pista conocida como Cañada de las Cruces. A través de ella entramos
en un acogedor y resguardado valle en cuyo fondo se aposenta el aprisco de la
Cañada de las
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Cruces. La vaguada es amplia, más o menos redondeada y abierta a
levante. La vegetación, salpicada de quejigos, sabinas y encinas, está muy
agostada. La escasez de lluvias y las fechas invernales hacen que los tonos
pardos predominen sobre los verdes. Vemos a nuestro frente la imponente cadena
formada por los altos de Piedra Jaén (2.148 m) y el Cerro Mágina (2.165 m).
Hacia poniente destaca la piramidal estampa de la Serrezuela (1.963 m). La
cañada gira en dirección E para terminar en una estrecha pero fácil vereda que,
en poco tiempo y esfuerzo, nos dejará en el collado del Puerto de las
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Alegas.
En este punto paramos para agrupar al personal que ha quedado un poco
desperdigado en la larga subida. Aprovechamos para tomar un pequeño refrigerio
a base de fruta y frutos secos y comentar el camino. Los paisajes empiezan a
ser amplios; podemos destacar hacia el sur el magnífico pinar que tapiza la
umbría de Antón León. Se trata de un oscuro y viejo pinar relicto de enormes
pinos negros (Pinus clusiana), salpicado en estos días por manchas de nieve.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Desde
el collado parte una vereda en dirección N-NW que va ascendiendo diagonalmente
en un largo aunque no excesivo desnivel por los contrafuertes sur de la cadena.
Por fin
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
logramos alcanzar un collado donde está situado el Pozo de Nieve de
Mágina. Desde aquí, por nuestra derecha, en muy poco tiempo podemos alcanzar el
Pico Mágina, punto más alto de la provincia de Jaén. Sin embargo, en este
collado nos volvemos a reunir todo el grupo para dirigirnos primeramente en
dirección W hasta Piedra Jaén, desde donde empezamos
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
un largo recorrido, en
dirección E, para así coronar todas las cúspides que salen a nuestro
encuentro.
Cuando alcanzamos el Pico Mágina es ya cerca de medio día. La agradable
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
temperatura y la falta de viento nos anima a hacer la parada para la comida en
el mismo vértice. Por supuesto no falta la bota de vino que corre con alegría
mientras disfrutamos
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
del entorno, de la compañía y entre charlas y risas
pasamos el ratillo. Por el sur atisbamos hacia el horizonte las blancas cumbres
de Sierra Nevada y por el sureste la cadena
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
blanqueada de la Sierra de Baza.
Hacia el noreste se alarga el sistema de Mágina hasta el pico de Miramundos
(nuestro próximo destino) y ya por el norte destacan algunos altos: Cerro Ponce
(2.005 m), Cerro las Cárceles (2.012 m) y toda una sucesión de altos menores
que caen bruscamente hasta descansar sobre la campilla de olivos.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Después
de este largo descanso nos ponemos nuevamente en camino. Una parte de los
compañeros (6 de ellos) deciden volver por donde hemos venido. Otro grupo (los
9 restantes) nos encaminamos hacia el cerro Miramundos (2.077 m) y el refugio
que hay
cerca del mismo. Sin una
vereda evidente seguimos con el rumbo fijo hacia la caseta saltando por las
rocas calizas fracturadas por lapiaces y sorteando la vegetación a base de
enormes tapices de sabina rastrera (Juniperus sabina) que salpican el rocoso
suelo. Con cuidado de no caer entre las grietas de los lenares, pronto llegamos
al cerro Miramundos.
En la cumbre hay un refugio aparentemente en buen estado
pero con aviso de posibilidad de derrumbe. El sitio es bonito, casi huérfano de
vegetación, muy despejado y con unas
vistas sobrecogedoras. Contemplamos con
deleite el vasto entorno mientras iniciamos el descenso. Marchamos dirección
S-SW a través de la Hoya de la Encantada para enlazar en el
Collado del Puerto
de las Alegas con el mismo sendero que usamos esta mañana para subir. Desde
aquí por la Cañada de las Cruces y el sendero descendemos con rapidez hasta el
inicio para cerrar el círculo.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
La
satisfacción es la tónica reinante, satisfacción por el largo recorrido
realizado sin contratiempos, satisfacción por haber coronado las cimas más
emblemáticas de este macizo. En resumen, todos quedamos complacidos por la
agradable compañía y la complicidad que ha reinado durante todo el día. Con
ansiedad esperamos que Arielle nos recite los datos técnicos finales, a todos
nos gusta saber la distancia final recorrida y el tiempo empleado, así como el
desnivel positivo acumulado. Después unas cervezas y unas tapillas aclaran las
gargantas y reconfortan los cansados cuerpos.
clicar sobre esta imagen para verla ampliada
Los datos finales
son como sigue:
Distancia total
recorrida: 23,71 km
Tiempo total
empleado: 08:41 h
Desnivel positivo
acumulado: 1.553 m
Podéis bajaros esta
ruta para GPS en la siguiente dirección de wikiloc:
Texto y
fotografías: Arielle & Enric
Enhorabuena por tan meticulosa
ResponderEliminary poética descripción de la ruta,
el sendero que nos lleva al cielo
cuando surcamos la sierra,
de momento me conformo con la
del "poble" que dicho sea de paso,
me entusiasma,
un abrazo,
de Ignacio y Maria Teresa